Despedida y felicitación de Navidad por adelantado

En un par de días nos vamos a pasar la Navidad a España....yujuuuuuuuu! Y ya estamos en Modo España ON pero con frío. Me encantaría escribir algún post desde España, pero me conozco, y al final seguro que no me va a dar tiempo; me va a pasar lo mismo que en septiembre, que acabé pidiendo perdón en un post, por teneros tanto tiempo abandonados, y además sin avisar.

Así que he decidido dejar los deberes hechos, despedirme en condiciones y así desconectar al 100% y estar a lo que estoy, con la familia y los amigos en España, que nos lo merecemos.

Os quiero desear a todos una Feliz Navidad, que sean "días de familia", de disfrutar al máximo y de dar lo mejor de nosotros mismos. Para los que creemos en Dios, es una de las fechas más importantes del año. Nace un Dios que es BUENO y que nos quiere inmensamente, que perdona por encima de todo, que no nos recrimina nada. Unas fechas en la que yo me he propuesto mirar con ojos de "niña", para ver con los ojos del corazón, para sorprenderme con las cosas más sencillas. Para perdonar y para querer, para ensanchar mi corazón y para hacer la vida de los que tengo a mi lado y la mía un poquito mejor. Así que ¡Feliz Navidad y Feliz Año Nuevo! Que el año que viene sea por lo menos igual de bueno que éste o mejor.

Os dejo un anuncio de Navidad que ya he puesto en Facebook algún otro año, pero que me encanta. Es un anuncio de Falabella, una tienda chilena, tipo El Corte Inglés, donde aparecen niños de distintos países como Argentina, Colombia, Chile.... dando un mensaje de Navidad de los niños a los "grandes". Espero que os guste a vosotros también.
¡Besos fuertes y nos vemos en enero!

9 planes que quiero hacer en Madrid estas Navidades

Se van acercando las fechas, y yo, como siempre, empiezo a hacer planes y a ilusionarme con pasar la Navidad en Madrid. Bien abrigaditos, con gorro y guantes, soñando con ver las calles iluminadas con sus luces, ya siendo de noche a las 6 de la tarde.
Hoy quería compartir con vosotros, 9 planes que quiero hacer estas Navidades. Así que, ahí van, por si alguno se anima.

                                                       Fuente: www.traveler.es

1. Mercado de Motores: Llevo todo el año viendo en un montón de blogs y sitios como la gente lo recomienda. Y además la semana pasada Francis me comentó que le apetecía mucho ir. Un lugar espectacular como es la antigua estación de Delicias con zonas cubiertas y otras al aire libre, música en vivo y un montón de puestos y tiendas de muebles, antigüedades, ropa, juguetes... donde a lo mejor sus Majestades de Oriente encuentran algún regalito para quien se haya portado bien... Es un plan que se puede hacer perfectamente con niños, iremos en metro, que les encanta, e incluso nos tomaremos algo allí ya que hay sitios para tomar y beber algo.
Las fechas para estas Navidades son: 13 y 14 de diciembre y 20 y 21 de diciembre
El horario es de 11:00 a 22:00
Os dedo el link de su página web aquí

2. Mercadillo Navideño HOVSE: Me encanta ir en Navidad a este tipo de mercadillos a buscar algún regalo especial. Tres plantas en un edificio emblemático en pleno Madrid. Éste parece uno de esos sitios cuidados y llenos de detalles, y además lo he visto recomendado en mil lugares. En esta pop up, hay hasta 80 firmas distintas que abarcan desde flores, muebles, tiendas gourmet, joyas... Es un buen plan para ir a última hora de la mañana y aprovechar para tomarte el aperitivo en la tercera planta, ya que allí está La Vermutería.
Abren todos los días de la semana domingos incluídos de 11:00 a 21:00
La dirección es: General Arrando 40
Podéis entrar aquí para ver más detalles.

3. Bocata de calamares en la Plaza Mayor: Esto está más claro que el agua. Qué hay mejor, que con el frío que hace en Madrid en diciembre, meterte a hacer una paradita en algún bar cercano a la plaza mayor y tomarte un bocadillo de calamares con una caña!!! Y con lo que le gustan los calamares a Gloria seguro que nos cuesta luego sacarla de ahí... Nosotros solemos ir a "Casa Rua" pero hay un montón de sitios y en todos muy ricos.

4. Ruta de vinos y tapas por Madrid centro: Este plan lo llevamos haciendo desde hace muuuuuucho tiempo, desde que Francis y yo éramos novios. Los sitios a los que solemos ir, siempre a la hora de la comida son:
 El mítico sitio de "las bravas", el sitio que tiene patentada la salsa, que es una cadena; sitio cutre donde los haya, pero las bravas están de muerte.
 Un caldito en el "Lardhy", porque el sitio no es que sea de lo más barato, pero para tomarte un caldito está genial y rico rico.
 Una "tajadita de bacalao" en "Revuelta" éste sitio está detrás de la Plaza Mayor, en frente de la Cava Baja y también es un sitio de toda la vida, pequeño y donde prácticamente todo el mundo está de pie o en la barra. Lo típico de éste sitio, es tomar un trozo de bacalao rebozado que sabe a Gloria.
 Unas gambas al ajillo en "El Abuelo", otro clásico donde los haya y castizo a más no poder. Ahí el que se deleita es Francis, porque yo con mi alergia al marisco, no puedo, pero merece la pena el sitio tan clásico.
 Otro sitio por el que solemos pasar es "El Gato" en el barrio de Las Letras, que ahí suelen tener algún pintxo para rematar.
 Y por último siempre hacemos parada en algún sitio nuevo, cada año distinto, que tenga buena pinta por fuera. Como veis, los sitios no son para nada "chic" o modernos, sino todo lo contrario, es una ruta clásica, de las de toda la vida y me gusta porque a la vez que te tomas unas cañas con unas tapas, te das un buen paseo por Madrid.

5. Ruta de los Belenes: Este plan me encanta, porque lo hacíamos con mis padres cuando éramos pequeñas y me trae muy buenos recuerdos. La verdad es que en Madrid hay Belenes que son verdaderas obras de arte y por el centro, si os metéis en cualquier iglesia, seguro que os encontráis con alguna joya. Algunos de los que más me gustan son, el de la Iglesia de San Ginés (Arenal 13), el Convento de las Carboneras (Plazuela del Conde de Miranda, detrás de la Plaza de la Villa) o el del Cristo de la Victoria ( Blasco de Garay 33). Otros clásicos como el que siempre ponían en la Plaza de la Villa, pero los últimos años lo han instalado en el edificio de Correos. En San Lorenzo de El Escorial, por si alguno se anima a hacer alguna excursión, ponen todos los años un Belén gigante que recorre todo el pueblo, es una pasada y los niños lo pasan bomba.

6. El Prado con niños: Una tía mía, me mandó el otro día una información sobre unas audioguías-infantiles en el Museo del Prado y mirándolo me pareció una idea genial. Creo que es buenísimo acercar el arte a los niños y aprovechar las obras de arte que tenemos en España. Yo desde luego, tengo muchísimas ganas de ir, y si además me lo ponen fácil para llevar a los niños pues mejor que mejor. Os dejo aquí el link de las audioguías.

7. Cortilandia: Un clásico con los níños. Si cuando eras pequeño, no fuiste a Cortilandia, has perdido tu infancia (guiño, guiño). Da igual estar una hora esperando a que empiece y luego se muevan sólo un par de muñecos, no importa pasar frío, y está claro que al final, los mayores diremos... pues no es para tanto... pero, ¡hay que ir!

8. Teatro Conde Duque: Todos los años hay un montón de actividades para niños, teatros, cuenta cuentos, manualidades y hasta una pista de patinaje sobre hielo.... hay que comprar las entradas con tiempo porque se acaban rápido pero son bastante baratas y merece la pena. Os dejo aquí el link para que veáis el programa. Es del 23 de diciembre al 4 de enero y está en la calle Conde Duque.

9. Dabbawala: Llevo varios años queriendo ir a este restaurante, y al final entre unas cosas y otras nunca me ha dado tiempo, pero de estas Navidades no pasa. Un restaurante pequeño con menú degustación y con una carta que tiene una pinta estupenda. En la parte de abajo tiene un "underground" donde puedes comer o cenar al estilo tapeo. Yo me inclino por una cena romántica con Francis arriba. Ya os contaré...  La dirección es calle Españoleto, 10. Os dejo el link del restaurante Dabbawala.

En enero os diré si he conseguido hacer todo lo que me he propuesto... Y vosotros, ¿tenéis algún plan que vais a hacer si o si estas Navidades?

1 de diciembre: Adornos Navideños y un calendario de Adviento express

Hace un par de semanas, a Borja volvieron a atacarle los virus... es curioso que en todo el invierno no se pone malo, pero llega la primavera y no se libra de una. Así que después de varios días muy raro le llevamos a urgencias y el pobre tenía otitis y bronquitis. El fin de semana siguiente nos tocó quedarnos en casa porque no estaba recuperado del todo, así que en uno de esos momentos de desesperación en el que ya no sabes ni qué hacer, Francis bajó al trastero y subió todos los adornos de Navidad: árbol, nacimiento, decoraciones varias... y nos pusimos a ello. Mira que me quejo de que cada vez las tiendas ponen antes la decoración Navideña, pues resulta que yo soy peor...

Como ya es tradición en nuestra casa, al día siguiente fuimos a comprar unos adornos para el árbol. Cada uno elige uno nuevo y así poco a poco vamos llenando el árbol. Los chicos se fueron por un lado y las chicas nos fuimos por otro y éstos fueron los elegidos.

Con la corona y el calendario de Adviento, este año he seguido el lema de "menos es más". Así que no me he complicado la vida y compré unas velas doradas, una corona navideña y unas cintas plateadas. Lo pusimos todo encima de un bajo plato que me regaló mi suegra y ¡listo!

También había visto en IG una idea que me había encantado. Poner la corona de Adviento encima de un recipiente alto para tartas, pero como no tenía dicho recipiente, me lo he ahorrado y lo dejaremos para otro año, pero os cuento la idea por si os sirve.

Ayer encendimos la primera vela mientras rezábamos por la noche con los niños y fue todo un espectáculo, los dos intentando apagar la vela... ya sabéis: niños + vela = cumpleaños.

Este sábado, contra todo pronóstico, estuvo lloviendo en Santiago toda la tarde. La verdad es que tengo que reconocer que fue mi salvación para llegar a tiempo con el calendario de Adviento porque casi nos pilla el toro. Tengo que avisaros que no soy nada manitas para esto del DIY (las manualidades de toda la vida) no tengo mucha paciencia y no se me da muy bien, así que fuimos a comprar los materiales: unos vasos gigantes de cartón como para cumpleaños, unas pinzas de la ropa monas y una cuerda y Gloria y yo nos pusimos manos a la obra.

Colocamos los vasos con pinzas en unas cuerdas que colgamos de la pared y escribimos unos propósitos para cada día (esta idea se la he copiado a mi tocaya Esther, del blog La Merienda a las 5 que podéis ver aquí). Luego rellené cada vaso con alguna sorpresa que incluían, chuche, dulces, chocolates y "vales por". Esto último también es copiado de otro blog, Escarabajos, bichos y mariposas que podéis ver aquí. Me parece una idea genial porque así hay sorpresas de todo tipo, unas llenan la barriguita y otras el corazón. Así que hay por ahí algún "vale por" ir al circo (aprovechando que el abuelo Julio ha comprado entradas) o un "vale por" una merienda de tortitas con chocolate con la abuela Pilar (la abuela Pilar todavía no lo sabe, pero seguro que estará encantada).

La mitad del calendario con sus respectivos propósitos ya la tenemos guardadita para meter en la maleta y que vaya con nosotros en plan "caledario itinerate.

Así que nosotros, ya estamos listos para empezar la previa a la Navidad, para prepararnos para la llegada del Niño Jesús y para recibirle en nuestra casa y nuestro corazón como se merece.

Y vosotros, ¿ya lo tenéis todo decorado? ¿o sois de los que esperáis al día 8 como debería ser?

¡Feliz lunes y feliz comienzo de diciembre!

P.D: Para los que vivís en Chile, todos los materiales los he comprado en casa & ideas.

Truco de lo más "chic" para servir el agua a tus invitados

Aquí en Chile ya he visto, que en un montón de restaurantes y casas, sirven el agua con algunas frutas o verduras dentro. Me parece una idea de lo más fácil y resultona.

                                                         Fuente: www.consentido.cl

Le puedes poner limón, fresas (o frutillas), frambuesas, pepino, menta, romero... o varias mezcladas, a gusto del consumidor. La idea es llenar la jarra de agua y ponerle hielo para que esté muy fría, y un rato antes de servirla, ponerle la fruta o verdura. A mí me gusta con trozos grandes; el limón y pepino en rodajas, la fruta como fresas o frambuesa enteras, porque la idea es que sea un agua con un ligero sabor al ingrediente que hayáis elegido, no un zumo o jugo. Y a mí personalmente, no me gusta que caigan los trozos en los vasos, por eso pongo 2 o 3 fresas, o 3 rodajas de limón.

                                                     Fuente: www.nuevanavidad.cl

Fuente: Pinterest

 

 

Fuente: Pinterest

                                                     Fuente: www.evtasarimlari.com

Me parece una idea genial visualmente y de sabor.

¡Feliz jueves!

Una tarde en un campo chileno

La semana pasada, una amiga de Gloria la invitó a pasar la tarde en el campo. A los chilenos les encanta el campo, cosa que es completamente lógica, ya que es un país de naturaleza en estado puro, sólo hay que ver la cordillera de los Andes que te acompaña al este en cada viaje o recorrido que haces por Chile.

El caso es que me pareció un plan estupendo, y después de merendar nos fuimos en coche con ellos a pasar la tarde. Lo bueno es que estaba a las afueras de Santiago y no tardamos mucho en llegar.

Tenían gallinas, caballos y hasta le dieron de comer a las vacas... Gloria con un poco de miedito, ella es así, miedosa y teatrera, ¡una mezcla explosiva!

Tienen unos terrenos donde plantan lechugas, cebollas, rúcula, espinacas, acelgas, calabacines.... y todo orgánico.

Las niñas lo pasaron bomba arrancando las lechugas y jugando a que eran ramos de novia. Es increíble la diferencia entre una lechuga orgánica y las que venden en los supermercados, por lo menos, a simple vista son mucho más grandes y tienen mucha mejor apariencia.

Jugaron en una casita que tenían de juguete y con un carrito de campo con el que dejaron volar su imaginación.

Esa tarde me hizo pensar que los niños son felices en el campo, montaña, en la sierra.... con las cosas más simples y rodeados de naturaleza. Que no hace falta que tengan grandes juguetes o grandes cosas, lo esencial les hace felices. Compartir con los amigos una tarde en el campo, en el que vieron animales, arrancaron lechugas, corrieron, dejaron volar su imaginación, se rieron y disfrutaron como lo que son, niños. Así que muchas gracias Lupe, por la invitación, ¡lo pasamos "chancho"!

P.D: Todas las verduras que cultivan las venden como marca "Vegus" en el jumbo, pero están empezando a repartir a domicilio y mucho más barato, así que si estáis interesados, podéis escribirme al mail y os paso el contacto.

¡Feliz semana!

Flores, plantas y color en "Jardinera"

A mi todo lo que tiene que ver con flores me encanta, me parece que la vida no es igual con flores que sin ellas. Con color la vida se ve de otra manera...

Esta tarde he estado con una amiga en la Feria Jardinera, hemos ido a última hora de la tarde, estaba cansada y la verdad es que aunque habíamos quedado ayer, ya no me apetecía, pero tengo que reconocer que ha sido de las mejores cosas del día , junto al café de esta mañana con mi amiga María.
Hemos visto todo tipo de jardines, plantas y flores. Desde flores naturales y artificiales que parecen de verdad, macetas ideales, cactus y todo tipo de plantas: colgantes, suculentas o buganvillas.

Tiendas como El Almácigo, donde te montan tu pequeño huerto para llevar a casa con lo que quieras: tomates cherry, albahaca, cilantro o ciboulette (os aviso que yo ya tengo uno)

Hay muebles de jardín o terraza, todo tipo de puestos de decoración de exteriores y con un gusto maravilloso.

Como hemos ido a última hora, no había mucha gente y ya tampoco hacía mucho calor así que hemos estado muy a gusto. Al final del recorrido nos hemos tomado una coca cola, porque en todo el recinto hay puestos y mini cafés de "La Cocinería" con mesitas para tomar tanto salado como dulce.

Lo que más me ha gustado ha sido la zona de niños, lleno de tipis, mantitas para el suelo, columpios y un recinto del "Play + Grow" Ombú, con actividades para niños (os dejo el planning del fin de semana).

También hay música en vivo y talleres durante el día, pero sobre todo, muchas ideas para tu terraza o jardín y ¡COLOR, mucho COLOR!

Si vas este fin de semana, supongo que estará bastante lleno, así que yo intentaría ir a alguna hora en la mañana pronto o a última hora.

Esta feria es del 13 al 16 de noviembre en el Parque Araucano (detrás de Parque Arauco).
El horario es de 10:30 a 22:00 hasta el sábado; el domingo sólo hasta las 20:00.
La entrada es de $6.000 (es un poco carilla, para qué nos vamos a engañar).
Para los residentes de Las Condes y los socios de El Mercurio $4.500.

Así que si queréis ver el fin de semana con color, ir a Jardinera.

¡Feliz fin de semana!

Mañana en el ZOO

Aquí en Santiago el viernes fue fiesta, así que aprovechamos para hacer un plan diferente con los niños. ¡Parece mentira que no les habíamos llevado al ZOO todavía! Si, no somos mucho de animales, pero cuando uno es padre tiene que hacer este tipo de cosas...

En Santiago y alrededores, hay 2 Zoos: uno en Santiago centro, en la zona de Bellavista (dentro del Cerro San Cristóbal) y otro a unos 50 km de Santiago, en Buín. El de Buín tiene más animales, es más grande, y todo el mundo comenta que está mejor cuidado. El de Santiago tiene la ventaja de que está cerquita de casa y no tenemos que hacer un trayecto largo en coche, y a mi personalmente me sorprendió porque tiene bastantes animales, y para pasar la mañana está estupendo.

Lo primero que hicimos en la entrada es comprarle a Gloria unos prismáticos, costaban $1000, al cambio más o menos 1 euro y 1/2, así que imaginaros lo que han durado... lo justito para una mañana en el Zoo, pero ella estaba encantada, se sentía en un safari...

Vimos, elefantes, jirafas, flamencos, monos... y muchos animales con nombres rarísimos de Sudáfrica.

A Borja los que más le gustaron fueron los tigres y los leones, debe ser porque ya sabe hacer los ruidos... Pero lo que definitivamente le encantó, fue ponerse detrás de un panel con Gloria donde parecían los dos unos pequeños koalas.

El Zoo de Santiago está en un cerro, así que aunque hay que subir algunas escaleras y alguna cuesta, al llegar arriba hay unas vistas preciosas.

Nosotros llevamos el carrito y no tuvimos ningún problema. Hicimos arriba una parada técnica y compramos unas patatillas y unas botellitas de agua, mientras vimos a los canguros y las alpacas, y así pudimos hacer una pequeña parada para descansar.

Al bajar vimos pingüinos y focas marinas, serpientes y tortugas.

También había un teatro de títeres que empezaba a las 13:00 y allí además pintaban las caras a los niños. Por supuesto, Gloria se pintó de mariposa, estaba claro, que el plan perfecto era convertirse en un animalillo más del Zoo para pasar desapercibidos.

Fue un plan redondo que terminó en un restaurante español que está justo abajo, a la salida del Zoo. Se llama la Bodeguita de Cristóbal, y para mí lo mejor son los calamares a la romana, la paella y el cabrito (tranquilos, que no pedimos todo, sólo es una recomendación...) así que ya sabéis, un buen plan con niños para pasar la mañana si estáis en Santiago.
¡Feliz semana!

Receta Lemon Pie

Tengo que haceros una confesión, y es que el dulce me vuelve loca. Si tengo que elegir entre dulce o salado, siempre elijo dulce. Una de las cosas que en este sentido peor he llevado, es que desde que nació mi hija mayor, me diagnosticaron "resistencia a la insulina" y eso significa que si no me controlo con el azúcar acabaré siendo diabética dentro de poco, así que estoy en ello, y cuando tomo algo dulce, trato de hacerlo en pequeñas cantidades.... pero esto no significa,  que no comparta mis mejores recetas de postres con vosotros

 

El jueves tuve una cena y llevé un lemon pie, así que, aprovechando que quedó muy rico, os paso la receta para que disfrutéis de ella tanto como yo (aunque espero que vosotros probéis un poquito más...)

El lemon pie tiene un base de masa quebrada, un relleno de limón, y está coronado con muuuuuuuuuuucho merengue. Es un postre muy típico aquí en Chile, en todas las pastelerías a donde vayas encuentras uno en el mostrador. Además tienen una pinta impresionante, porque los chilenos son unos auténticos expertos con el merengue (en concreto con el merengue italiano, ese que el elástico y brillante y no se baja a la primera de cambio).

Así que aquí os dejo la receta del lemon pie que acompañada de un café o un te, va estupendo.

Para la masa:
. 2 tazas de harina
. 1 taza de azúcar glas (azúcar flor para los chilenos)
. 100 gr de mantequilla sin sal cortada en cuadraditos a temperatura ambiente

Juntar todos los ingredientes y amasarlos con la mano. Cuando estén todos los ingredientes completamente integrados, poner la masa en un molde de tartas o bizcocho redondo y aplastar con las manos, estirando los bordes hacia arriba, hasta que quede una capa fina (pero que no se vea el fondo del molde). Introducir al horno a fuego medio durante unos 5 minutos con el horno previamente calentado, hasta que haya cogido un poco de  color (muy poco, sólo que veáis que no está crudo).

Para el relleno:
. 1 bote de leche condensada (400 gr)
. 1 taza de zumo de limón
. 2 yemas de huevo

Mientras que la base está en el horno, mezclais todos los ingredientes, hasta que estén unidos,como una crema. Poner esta mezcla encima de la base de la tarta (recién cocinada) y volver a meter en el horno durante 7 u 8 minutos, hasta que la mezcla esté firme (que no esté líquida)
Dejar enfriar a temperatura ambiente y una vez que esté frío meter en la nevera.

Para el merengue:
. 6 claras de huevo
. 2 tazas de azúcar normal
. 1/2 taza de agua fría

En una olla pequeña, poner 2 tazas de azúcar y 1/2 taza de agua fría y mezclar. Poner al fuego y dejar que hierva unos 8 minutos sin mover, hasta que quede, lo que en Chile llaman un almíbar de pelo; esto significa, que al meter una cuchara y sacarla, cae el almíbar consistente, como un hilo fino. Batir las claras a punto de nieve y cuando estén firmes, añadir el amíbar caliente muy poco a poco, y que caiga como un hilito fino. ( Yo ahí pedí ayuda, porque es mejor no dejar de batir). Batir por lo menos 10 minutos, y hasta que el merengue ya no esté caliente. Poner el merengue encima de la tarta cuando ésta ya esté fría. Meter en la nevera hasta servirla.

No os asustéis que de verdad que no es nada difícil. Así que animaros, que con este postre, seguro que sorprendéis a todo el mundo y triunfáis.

¡Que tengáis una feliz semana!

A vosotras ¡por valientes, por guapas y por madrazas!

Mi abuela Gloria (MamaGloria para los nietos), se fue a vivir a Asunción, Paraguay, al poco tiempo de casarse. Allí estuvo viviendo unos 7 años, y allí también nacieron sus tres primeros hijos, entre ellos mi madre. Tenía contacto con sus padres a través de cartas, por supuesto, que en esa época, no existía ni skype, ni teléfonos móviles, ni toda la tecnología que tenemos ahora. Durante todo ese tiempo, sólo viajó una vez a España, y lo hizo en barco con su hijo mayor.

Hoy he hablado con Bárbara, una amiga que también es española y vive en Santiago. La semana pasada nació su primer hijo. 

 

 

No he podido ir a verla todavía, pero estos días he vuelto a experimentar y recordar esa sensación que tuve cuando nacieron mis hijos aquí en Chile. Esa sensación de estar viviendo uno de los mejores momentos de mi vida, pero lejos de la familia. Bárbara ha tenido la suerte de que su madre ha podido venir a acompañarles en estos días tan bonitos, y yo también tuve la suerte de que mi madre viniera cuando nacieron mis dos hijos, es verdad que hoy hablábamos de que no nos podíamos quejar, efectivamente, no tenemos la misma situación que la que vivió mi abuela, o las situaciones dificilísimas que viven, ahora mismo, otras madres lejos de su país. Pero yo creo, que todas las que damos a luz lejos de los nuestros, vivimos una situación parecida de máxima alegría y a la vez esa pena de no tener cerca los abrazos y el cariño de los más cercanos. Es por eso que hoy quería hacer este pequeño homenaje a todas las mujeres que dan a luz lejos de su país, porque si ya el parto (o cesárea) es complicado, en otro país se hace un poquito más difícil. Así que, a Bárbara y a MamaGloria; a Blanca, Paty, Paula, Nuria, Lupe, Celia, Sonia, Mariola, Mapi.... y a todas las que son madres en otros países que no son los suyos. ¡Por valientes, por guapas, y por madrazas!

 

¡Que tengáis una feliz semana!

Momentos únicos

Más de uno, habrá pensado que ya se me había pasado el boom de los primeros días del blog, y que esto se había acabado. Pero no, nada más lejos de la realidad...

Os pido disculpas porque me fui sin avisar. Ni un mísero: "hasta luego, me voy de vacaciones", o un "estoy bien de vuelta en Santiago". La verdad es que pensaba escribir desde España cuando nos fuimos en Julio, pero me resultó imposible. Y la vuelta, ha sido como siempre, durilla y con mucha pereza para volver a la realidad. Pero estoy de vuelta, que es lo importante, y prometo escribir asiduamente como lo venía haciendo hasta las vacaciones (que se han alargado más de la cuenta).

El verano ha sido estupendo, mucho calor, familia, playita, amigos y desconexión (en todos los sentidos). Lo hemos pasado estupendamente.

La vuelta, como viene siendo habitual desde hace 5 años, es esa mezcla entre: "qué bien llegar a casita" y "en España se está tan bien...". He estado pensando seriamente sobre ese tema estos días, y a mí lo que me pasa es que idealizo lo que no tengo. Cuando estoy en España, echo de menos mi casa y mis rutinas; y cuando estoy aquí en Chile, no paro de pensar en las siguientes vacaciones o lo bien que estaríamos si viviéramos en España cerca de nuestras familias. La verdad es que así no disfruto plenamente de lo que tengo, y al final vivo pensando en el futuro y no en el presente. Así que he tomado la firme decisión de disfrutar del día a día, del tiempo que nos queda en Santiago (que no sabemos si siguen siendo 3 o 4 años, igual que en 2009, o nos queda algo menos...); de los grandes amigos que hemos hecho aquí; de las plazas, los jugos de frutilla, el manjar y los asados; poder ir a pasar el día a la playa; estar el fin de semana los 4 juntos, y que buenos amigos nos inviten a pasar el día con ellos, como si de nuestra familia se tratara; quiero disfrutar de no trabajar y estar con mis hijos casi todo el día, aunque por las noches siempre diga que estoy "saturada de niños"; desayunar los domingos tortitas viendo el "Manquehuito", cocinar con cilantro, ir a la feria y que me digan : ¿qué quiere mi caserita?; quiero disfrutar de "no saber qué hacer los fines de semana", escuchar hablar a Gloria con acento chileno, de los Andes inmensos que no tienen fin... y de tantas y tantas cosas, que cuando volvamos a España, recordaré con muchísimo cariño, y "extrañaré" mucho más de lo que ahora me imagino. La vida está hecha de momentos únicos que hacen que ésta, sea diferente a todas las demás, y lo importante es disfrutarlos sabiendo que no se volverán a repetir.

¡Feliz jueves!

Sol de invierno

Siempre me ha encantado la música. Francis dice que en cuanto suenan las primeras notas de una canción en la radio, ya se de quién es y me pongo a cantarla... aunque sea en inglés y no me sepa la letra. Vamos, que soy de esas que se pone a cantar en una especie de idioma desconocido que "parece inglés", pero no lo es... todo, ¡menos quedarme callada!
Bueno, el caso es que hace un mes y medio, un sábado cualquiera en nuestra familia, aquí en Santiago, nos fuimos al parque a pasar la mañana. Hacía muy bueno, sol, pero no calor, y la sorpresa fue cuando llegamos y nos encontramos un concierto en pleno parque. Una chica, bajo un pequeño escenario, cantando Bossa Nova.

 La verdad, es que lo primero que pensé fue, ¡qué planazo!, porque aunque llevo a mis niños al parque encantada, tampoco soy la típica madre "parque-adicta". Si no va alguna amiga con hijos con la que hablar un rato... pues la verdad: PEREZA TOTAL. Así que cuando llegué y vi el panorama, pensé, los niños juegan y mientras nosotros escuchamos algo de musiquita. En frente del escenario había unos pufs para sentarse, y también había gente con unas mantas en el césped. Gloria, en vez de subirse a los columpios, fue directa al escenario, le debió parecer que el parque lo tenía muy visto, y se quedó embobada con esa música brasileña y esa voz.

Estuvo un buen rato sentada, con su muñeca, y yo la estuve mirando de lejos. Disfrutó de lo lindo y la verdad es que la gente la miraba y sonreía... de verdad, era un espectáculo, parecía toda una señora.
Y Borja a lo suyo, jugando con la arena y con cualquier juguete que se encontró.

Pensaréis que por qué os cuento esto, habiendo pasado tanto tiempo, pero es que hoy, he estado mirando el tiempo para el fin de semana, y después de varias semanas de frío y lluvia, por fin parece que vamos a tener solecito, y me he acordado de estos conciertos, que son un programa de la municipalidad de Vitacura (un barrio de Santiago), que se llama "Sol de Invierno" en el que todos los sábados entre abril y agosto hay música al aire libre, de diferentes tipos (jazz, clásica, flamenco, fusión...), a las 12,00 en parques y plazas de esta comuna. Así que todos los que viváis en Santiago y os venga bien, ya sabéis, este sábado, ¡hay plan!.
Os dejo aquí el link, con todo el programa para que cada uno se organice con el tipo de música que más le guste, y lo que os quede más cerca de casa.   http://www.vitacura.cl/actividades/detalle/380/musica-al-aire-libre-sol-de-invierno


¡Feliz fin de semana!

Bizcocho de plátano

La semana pasada, los virus llegaron a casa, eso sí, despacito y sin hacer mucho ruido. Poco a poco hemos ido cayendo, como a trompicones, pero gracias a Dios, nada grave. Así que, como hemos estado sin salir unos cuantos días, y aquí, en nuestra casa, los fines de semana significan sobre todo cocinar, os dejo una receta de bizcocho (queque para los chilenos) de plátano. Es una receta que me dieron cuando llegué a Chile, y aparece de las primeras en mi cuaderno de recetas. Está riquísimo, a los niños les encanta y es un desayuno de éxito seguro.

Ingredientes:

. 2 tazas de harina
. 1 sobre de polvos de hornear (los polvos Royal de toda la vida, que si viene en bote son más o menos 2 cucharadas)
. 2 plátanos muy maduros
. 3 huevos (no muy grandes)
. 125 gr de mantequilla
. 1 taza de azúcar
. 1 cucharadita de te de esencia de vainilla
. 1/2 taza de leche

Paso a paso:

Precalentar el horno.
Batir la mantequilla con el azúcar.
Añadir los huevos batidos uno a uno y la esencia de vainilla.
Una vez que están los ingredientes bien unidos, se va añadiendo poco a poco la harina (tamizada previamente) junto con los polvos de hornear, y se va alternando con la leche ( un poquito de harina, se mueve, un poquito de leche, se mueve, un poquito de harina.... y así hasta terminar con toda la harina y toda la leche).
Cuando está la masa perfectamente integrada, sin grumos, se aplasta el plátano con un tenedor y se añade a la masa, y se mezcla todo, para que el plátano quede bien repartido por toda la masa.
Se unta uniformemente con mantequilla un molde, y por encima se esparce un poquito de harina ( es para que sea más fácil desmoldar el bizcocho).
Se pone la masa encima del molde y se mete en el horno 40-45 minutos a 180º (esto depende mucho de cada horno, así que estará listo, cuando metáis un palillo al bizcocho y salga seco).
Cuando está terminado y frío, mi amiga Lupe le pone chocolate de cobertura fundido por encima, y le queda una tarta buenísima, aunque eso yo nunca lo he hecho, siempre he hecho el típico bizcocho para el desayuno, pero todo es probar...

No dudéis en hacer la receta y contarme qué tal os ha salido.

¡Feliz miércoles!

Modo España ON

Ya sólo quedan 15 días para que nos vayamos de vacaciones a España... ese segundo verano del que os hablaba el viernes. Y reconozco que a medida que se va acercando el momento, me entra en el cuerpo una especie de nerviosismo- alegría- angustia que no se muy bien cómo describir... bueno, si, algo parecido al partido Brasil-Chile de este fin de semana, pero con final feliz.

Una de las señales inequívocas de que nos vamos acercando a julio, es que cada día que pasa veo más el canal internacional (tve y antena 3), que hago comiditas "muy invernales" (un gazpachito, una ensalada bien fresquita...), me pinto las uñas de los pies de rojo, y ¡veo hasta el programa de cocina de las mañanas de la 1!. He de reconocer que las fotos de Facebook no ayudan NADA, esas selfies de los pies descalzos y la playa de fondo, esos helados gigantes que estando aquí me parecen infinitos, o esas fotos del atardecer con un comentario tipo: y son las 10 de la noche... Vamos, que estoy más allí que aquí.

Me pongo nerviosa, porque siempre que llegamos al aeropuerto de Madrid, se abren las puertas de la zona internacional, veo a nuestras familias y se me salta alguna lagrimilla de la emoción. Y ni qué contaros, del "momento aterrizaje" y la gente aplaudiendo... una horterada, si, pero tengo que reconocer que también lloro. Me pongo nerviosa, porque es un vuelo largo, con 2 niños, unos de ellos de 1 año, que para mí es la peor época, no para quieto ni un minuto, así que sólo de pensarlo...eso, ¡nerviosita perdía!

Y también algo de angustia, pensando en las maletas, que siempre vamos hasta arriba con mil cosas, que llevo de equipaje de mano pañales y ropa "por si acaso" como para un colegio entero. Angustia, porque me propongo hacer miles de planes y luego no los hago. Tampoco puedo ver a toda la gente que me gustaría, siempre se me hace corto, da igual que esté 2 semanas o 2 meses, siempre me faltan 2 o 3 días más, pero... "que me quiten lo bailao", ¡voy a España!
 
Sobre todo, me invade una alegría aplastante, porque al fin y al cabo "vuelvo a casa", aunque sea a la de mis padres. Porque vamos al veranito, nos bañamos en la playa, comemos "pescaito", estamos con la familia, vemos a los amigos, caen unas cañitas, que cuando estás tanto tiempo sin probarlas saben a gloria. Porque saldremos Francis y yo solos, y los niños se quedarán encantados de la vida con los abuelos... Y por muchas cosas más, así que mejor voy a pensar en las alegrías que nos esperan, porque al fin y al cabo, sólo nos separan 13 horitas... una mala noche.

¡Feliz lunes!

Viñas, campo y relax

 

Hace un par de semanas, cuando estaba aquí el abuelo Julio de visita sorpresa, fuimos a pasar el fin de semana a unas viñas a Santa Cruz.

 

Santa Cruz está a unos 200 km de Santiago, en la VI Región (la Región del Libertador Bernardo O'Higgins) y pertenece a la provincia de Colchagua. Es una zona que es característica por sus viñas, y estando en Chile, habiendo venido de visita mi padre y siendo una de las pocas veces que ha venido y yo no estaba en reposo o en fase post parto, estaba claro que teníamos ir a Santa Cruz...

 



Hace tiempo que mi amiga Celia, me había recomendado un hotel para quedarnos que se llama Hotel Casa de Campo. Ella es toda una experta en viajes, paseos y planes con niños, así que no dudé en seguir su recomendación. Como su nombre indica, el hotel es la típica casa de campo chilena de estilo colonial, aunque ésta, tiene una peculiaridad, y es que gran parte de ella, está hecha con maderas que ya no quiere nadie, de casas viejas que van a rehabilitar o tirar. Se nota que tiene vida, es un hotel pequeño y familiar con poquitas habitaciones y que regentan sus propios dueños (Armando y Virginia). A mi me encanta cuando voy a algún sitio y se nota que está cuidado cada detalle, cuando se nota el cariño que se pone en las pequeñas cosas, y la delicadeza hasta en el desayuno que te tomas. Allí estuvimos como en casa, estaba cercano a todo y tenía una explanada de césped en frente de las habitaciones perfecta para correr y jugar.

El sábado estuvimos visitando varias viñas cercanas. Hicimos una especie de "ruta de vinos" sin cata, Francis dijo que teníamos que surtirnos de vinos para el invierno y lo bueno es que cuando los compras en las propias viñas te salen muchísimo más baratos.

 La tercera viña en la que paramos se llamaba Viu Manent, y esa fue la que nos había recomendado Armando para comer. Fue la mejor elección, preciosa, con unas vistas espectaculares, además el tiempo acompañaba, porque aunque era mayo (aquí en Chile, últimos días del otoño), se podía estar perfectamente al aire libre sin abrigo. Nos sentamos tranquilamente a tomar el aperitivo (hay costumbres a las que uno nunca puede renunciar), mientras los niños corrían por el césped, recogían piedrecitas y las lanzaban. Os podéis imaginar quién recogía piedras y quién las lanzaba. Estuvimos un buen rato mirando los caballos que tenían allí y los carros con los que paseaban a la gente que iba de visita. Luego comimos allí mismo, en un restaurante con una comida deliciosa, carnes, ensaladas, mariscos.... fuera tenían columpios, así que fue un plan redondo.

Al llegar al hotel tenían las chimeneas encendidas y por supuesto dormimos la siesta, ya sabéis, lo mismo de antes, tradiciones, España, irrenunciables... El resto del fin de semana aprovechamos para conocer Santa Cruz, pasear, descansar, comer rico, "estar en familia"(como dice mi hija Gloria) y por supuesto, estar con el abuelo. La mayoría de las veces, uno no necesita grandes cosas para disfrutar de la vida, y éste, es uno de los "básicos" que he aprendido en Chile.

Espero que tengáis un estupendo fin de semana, nosotros ya tenemos reservado el sábado para hacer un "asado futbolero" en casa de unos amigos. Ahora que España ha perdido, ¡vamos "a muerte" con Chile! Nos vemos la semana que viene...